El objetivo de la regulación es garantizar el destino de los productos retirados y evitar que vuelvan a los circuitos comerciales, así como garantizar que las operaciones de retirada de productos con destino a la alimentación animal sean compatibles con el respeto al medio ambiente.nn

La Conselleria concederá las autorizaciones necesarias para poder llevar a cabo esta actividad a aquellos ganaderos, parques zoológicos, titulares de terrenos con aprovechamiento cinegético y demás empresas que dispongan de ganado que pueda ser alimentado con dichos productos y que cumplan todas las condiciones establecidas por la orden.nn

Las cantidades máximas de producto en estado fresco retirado que podrán ser suministradas a los beneficiarios de la medida con el fin de destinarlas a alimentación animal serán de 30 kilos por cabeza y día para ganado vacuno, 15 kilos para los ganados ovino, caprino rumiantes salvajes y suidos, y un kilo para aves de corral y caza menor.nn

Además, la orden establecerá los métodos autorizados para la inutilización de los productos retirados para fines distintos a otros que no sean la alimentación animal, con el objeto de garantizar su destino final y evitar que vuelvan a los circuitos comerciales habituales.nn

Entre esos métodos destaca la desnaturalización del producto, bien en origen o en destino, antes de su almacenamiento, y mediante el empleo de colorante autorizado para consumo alimentario.nn

Se establecen las condiciones en que debe ser esparcido el producto, una vez desnaturalizado, por los terrenos donde se encuentran los animales.