Actualmente Rusia exporta cerca de 22 millones de toneladas de cereales, y es posible que estas exportaciones se incrementen hasta los 27 millones de toneladas. El vicepresidente ha indicado que las empresas exportadoras pueden firmar con tranquilidad contratos para los próximos meses de abril, de mayo y de junio. Los precios mundiales de los cereales son elevados, y los pronósticos de la próxima cosecha son esperanzadores. Se prevé recolectar este año, al menos 94 millones de toneladas de cereales.

Lo único que puede impedir al Gobierno ruso realizar sus planes es el mal tiempo. En el año 2010 debido a la sequía y un verano con temperaturas extraordinariamente altas, Rusia tan sólo recolectó 60,9 millones de toneladas de cereales, lo que representó un descenso del 37%, respecto al año 2009.

El 15 de agosto del 2010, el Gobierno introdujo un embargo provisional a las exportaciones de trigo, centeno, cebada, maíz y harina, cuyo plazo de vigencia se extendió hasta el 31 de diciembre del mismo año. Posteriormente, esta prohibición se prorrogó hasta el 30 de junio del 2011. Solo después de esta fecha se pudieron exportar cereales rusos sin limitación alguna.