El consejero de Agricultura y Medio Ambiente, José Luis Quintana, ha informado que esta enfermedad ganadera no supone un problema de salud pública al no entrañar riesgos para el consumidor ni suponer ningún peligro para la cadena alimentaria.nn

Quintana recordó que tras el brote de la epizootia detectado el pasado fin de semana en el municipio gaditano de Jimena de la Frontera, Extremadura incrementó sus controles periódicos en colaboración con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) y las comunidades autónomas vecinas.nn

El consejero recordó también que, ante este problema ganadero, se acordó suspender la movilización de animales vivos de ovino, caprino y vacuno tanto en la región extremeña como en Castilla La Mancha, una medida cautelar y preventiva solicitada por el MAPA y que en el caso de Extremadura aparecía publicada en el Diario Oficial de la Comunidad Autónoma. nn

Explicó que aunque se detectaron varios casos de animales enfermos en la región, en principio no se pensó que había foco ya que todos estos rumiantes procedían de Andalucía.nn

Sin embargo, los servicios de alerta de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente confirmaron la presencia de focos de la enfermedad en la Comunidad extremeña, al comprobar que han aparecido también animales con lengua azul que no procedían de la región andaluza y que por tanto han sido infectados allí.nn

Quintana no precisó el numero de rumiantes afectados en Extremadura, pero indicó que se han sacrificado tres vacas y agregó que se han mandado muestras de los animales enfermos al Laboratorio de Referencia de Aljete para que determine los resultados serológicos.nn

De momento, en la región se mantendrá la alerta en toda la red sanitaria, se sacrificarán los animales afectados y se ejecutarán con mayor rapidez los análisis y muestreos en las distintas explotaciones.