La Organización Internacional para las Epizootías (OIE) acaba de informar de nuevos brotes de enfermedades animales en China que se suman a otros anteriores y están dificultando el desarrollo de su cabaña ganadera. Uno de ellos ha sido un brote de fiebre aftosa detectado en Henan que ha afectado a 1.200 cabezas de ganado vacuno. Se localizó a comienzos del pasado mes de marzo. Los animales fueron sacrificados y la zona se mantiene en cuarentena, además de tomarse otras medidas como la vacunación y la desinfección de las instalaciones.

También desde el Centro de Control de Enfermedades Animales del Departamento de Veterinaria del Ministerio de Agricultura de china, su director general, Zhang Zhongqui, informó a la OIE de la detección de un brote de influenza aviar altamente patógena de la variedad H5N6 localizado en Guangxi que ha afectado a más de 30.000 aves. Todas ellas murieron o fueron sacrificadas para evitar la propagación del brote.