El Gobierno de Corea del Sur ha intensificado el control sanitario sobre importaciones de carne de res procedentes de Estados Unidos ante la aparición de nuevos casos de encefalopatía espongiforme bovina atípica en ese país norteamericano, asegura KBS World Radio.

El Ministerio de Agricultura, Alimentos y Asuntos Rurales convocóa una reunión a entidades relacionadas con la seguridad alimentaria y el control sanitario. Las autoridades puntualizaron que los animales afectados esta vez por la llamada enfermedad de las vacas locas son reses de seis años y que las importaciones de carne bovina estadounidense que llegan a Corea del Sur son solo de animales menores de 30 meses.

Sostuvieron que lo propio es decidir las medidas a tomar una vez finalizados los análisis epidemiológicos en marcha en Estados Unidos, máxime considerando que la carne entra en el mercado surcoreano tras ser retiradas las sustancias de riesgo. 

Aún así, el Ministerio elevó del 3 al 30% la proporción de muestras de carne de res para analizar de las importaciones que proceden de Estados Unidos para inspecciones sanitarias al azar.