Asiccaza, la organización interprofesional de la carne de caza, ha emitido un comunicado en el que destaca que la caza de ciervos, jabalíes, gamos, corzos, perdices, palomas y otras especies supone, junto al turismo rural, una nueva dimensión para los pueblos españoles, ya que atrae hasta nuestro país a cientos de cazadores nacionales y extranjeros, generando un importante impacto económico.

Destaca que en nuestro país hay unos 32.817 cotos de caza lo que supone un enorme potencial de turismo. El 19% se concentra en Castilla y León, seguida de Castilla–La Mancha (16%) y Andalucía (16%). Además, más del 90% de La Rioja, Aragón, Cataluña, Navarra y Asturias están declaradas como terreno cinegético, según el último informe de la Fundación Artemisan.

A las casi 850.000 licencias de caza nacionales que se contabilizan actualmente hay que  añadir los 25.000 turistas extranjeros que visitan España anualmente para realizar turismo cinegético, procedentes principalmente de Francia, Italia, EEUU y también de países como Qatar, Emiratos Árabes y Arabia Saudí. Asiccaza los define como turistas con una alta capacidad adquisitva media-alta.

Tras esto, Asiccaza concluye que el consumo de carne de caza forma parte "del acervo cultural de la sociedad española".