Las autoridades locales chinas están obligadas a ofrecer ayudas, recompensas financieras y seguros a las granjas de porcino afectadas por brotes de peste porcina africana. La medida ha sido adoptada por parte del Ministerio de Agricultura y Asuntos Rurales de china para reducir el impacto de la PPA en el país y en el suministro de carne de cerdo al mercado local.

Otros de los planes pasan por ayudas provicionales así como el fortalecimiento con el apoyo de créditos.

Tras los brotes de PPA detectados en China y el sacrificio obligatorio de numerosos cerdos para evitar la propagación de la enfermedad, se ha estimado que la producción cárnica podría reducirse a lo largo de 2019. Además, el precio del ganado vivo se ha incrementado desde el comienzo de la enfermedad.