El presidente de la Asociación de Cría de Porcinos en el Sur del Lago de Maracaibo (Asoporsur), Manuel Carillo Hajos, indicó que sólo hasta el mes de junio de este año, la cifra de cerdas reproductoras no sobrepasaba las 200 en esta zona del país. Cuando la asociación fue creada el número era de 1200 y la hiperinflación que soporta el país hace difícil trabajar con el ganado porcino sobre todo el materia de alimentación animal

Las declaraciones, recogidas por el diario El Universal, llegaron con motivo de las declaraciones del ministro para la Agricultura y Tierras, Wilmar Castro Soteldo, quien afirmó hace algunas semanas que el Estado sería capaz de poder garantizar la venta de cerdo para la temporada decembrina, asegurando que la meta del Gobierno Nacional para finales de año es la de cero importación de pernil. 

“Mantener una dieta adecuada para los rebaños en medio de esta terrible crisis es imposible”, explica uno de los productores, señalando que los cerdos al Sur del Lago de Maracaibo solo están siendo alimentados con maíz, sorgo y plátanos. 

Al tiempo, el presidente de la Confederación de Asociados de Productores Agropecuarios (Fedeagro), Aquiles Hopkins, señaló que el consumo por parte de los venezolanos en proteínas como carne y pollo ha sufrido una caída de más del 70% en el último año, al igual que la producción de los principales rubros agrícolas, alertando que “la producción nacional ha sufrido una caída sostenida en los últimos 12 años”, alegando que no hay interés para revertir esta situación, explico el representante de la institución gremial. Hopkins recalcó que el sector agropecuario anteriormente abastecía “el 70% del consumo nacional de los alimentos, mientras que en la actualidad, en el mejor de los casos, solo estamos abasteciendo el 20% del consumo nacional” dijo. 

Entretanto, el presidente de Confederación Nacional de Agricultores y Ganaderos, José Agustín Campos, expresó que la falta de productos y sus altos costos “aprietan a los pequeños, mediados y grandes productores”, teniendo en cuenta que “debería de constituirse una alianza entre los sectores productivos, el gobierno y otros gremios para elaborar un plan de siembra que permita reactivar la actividad agrícola”, concluyó Campos.