Los productos de 'marca blanca' o marca del distribuidor duplicarán su cuota de mercado en los próximos años en España, pasando de un 22 por ciento actual a más de un 40 por ciento, según se desprende de un informe elaborado por PWC Consulting en el que se destaca que si no se toman medidas ahora, la distribución "se habrá convertido en dueña del mercado a costa de los fabricantes". nEl director de Productos de PWC Consulting, Luis Pérez Ballesteros, explicó que la tendencia española es similar a la de otros países europeos como Reino Unido o Bélgica, donde las marcas del distribudor ya tienen una cuota del 45 y 36 por ciento, respectivamente. nEl informe atribuye la relevancia que están adquiriendo los productos de 'marca blanca' sobre los de los fabricantes a que su calidad es similar y su precio es menor. Otros hechos que muestran el declive de las empresas fabricantes de productos de gran consumo frente a la gran distribución son: el descenso del gasto de los consumidores, que cayó en Estados Unidos desde un 17 por ciento en 1980 hasta el 12 por ciento en 2001; y la reducción del gasto en publicidad de los fabricantes, que fueron responsables del 45 por ciento del gasto publicitario durante los años 80, porcentaje que bajó al 19 por ciento en 1999. nnAsimismo, según el estudio, los minoristas aumentan de tamaño más rápidamente que las empresas de productos de consumo. Entre 1996 y 2000, los diez mayores 'retailers' del mundo aumentaron su cuota de mercado. Concretamente en el año 2000, los diez principales generaron 632.000 millones de euros, el 33 por ciento de las ventas de los cien más importantes. Además, el informe destaca la poca innovación en la industria, ya que, por ejemplo en Estados Unidos se lanzó en 2001 el doble de productos nuevos que en 1991, llegando a los 32.000 artículos. Sin embargo, sólo un 7 por ciento de los lanzamientos en 2001 puede calificarse como "innovación", lo que demuestra la saturación del mercado. nPor ello, ante el avance de las 'marcas blancas' sobre las de los fabricantes, PWC Consulting considera que éstos últimos deben actuar con rapidez y adoptar una estrategia "audaz, visionaria e innovadora". En su opinión, los fabricantes deben elegir una identidad y concentrar sus recursos en las actividades que le den ventaja competitiva; enfocarse más en las relaciones con los consumidores que en las transacciones y pasar de ser proveedores de productos a proveedores de soluciones para los conumidores; poner más enfásis en la innovación; pensar como sus clientes (la distribución) y colaborar con sus clientes y con sus proveedores.n