Frente a la posible subida, proponen modificar los tipos de IVA que se aplican actualmente a los productos de alimentación, incorporando las carnes frescas al tipo de IVA super-reducido. Este se aplicaría a los alimentos-materias primas (frutas, hortalizas, legumbres, cereales, leche, huevos y carnes) que son la base de nuestra alimentación y a partir de los cuales también se elaboran los productos alimenticios transformados.

También piden que las materias primas para la elaboración de piensos tributen con el IVA superreducido para paliar los importantes aumentos de costes de producción que está afrontando la ganadería.

Además, el sector pide también que todos los productos elaborados tributen con el IVA reducido permitiendo un reparto más justo de la carga fiscal y una mayor homogeneidad en su tratamiento.

Teniendo en cuenta la actual crisis económica y el incremento en los costes de producción, sobre todo por la subida del precio de las materias primas para alimentación animal, si el IVA subiera se podrían producir nuevas caídas en el consumo que "colocaría al sector en una situación económicamente insostenible, que también perjudicaría a otros sectores estratégicos de nuestra economía, como la hostelería, restauración y turismo".

Las asociaciones y organizaciones firmantes (Anprogapor, Ancoporc, Asoprovac, Anafric-Gremsa Anicoc Ovicebo, Aprosa-Anec, Fecic, Anice y Cedecarne) no entienden como puede llegar a incrementarse la presión fiscal sobre su actividad mientras "se mantiene el tipo super-reducido para artículos gourmet de otros productos alimentarios, o la consolidación de la discriminación del 50% de la cesta de la compra frente al otro 50%".