Según la organización agraria, se han contabilizado en 19 localidades de la provincia de Cáceres, lo que supone entre 1.500 y 2.000 piezas de ganado, que han abortado por causa directa de la vacunación contra la brucelosis.nn

El secretario general de COAG en Extremadura, Luis Cortés, reclama una vacuna menos agresiva contra la enfermedad, o que se indemnice a los ganaderos perjudicados.nn

De no producirse el acuerdo, COAG pedirá a la Junta el cumplimiento de la Ley de Sanidad Animal, que establece que cuando hay una campaña pública de vacunación se indemnizará a los ganaderos por los daños sufridos cada cabeza de ganado.nn

Para Cortés resulta difícil establecer las pérdidas que la vacuna contra la brucelosis está causando entre los ganaderos del norte de la región porque, en el mayor número de casos, los propietarios de las cabezas de ganado afectadas ocultan los casos de aborto, ya que en el momento en el que la Consejería de Agricultura tuviera conocimiento de un caso de infección procedería al sacrificio completo del ganado.