Liu Aihua, portavoz de la Oficina Nacional de Estadística de China, ha dado los detalles de la evolución del índice de precios al consumidor (IPC) en este país. En el último año, este ha subido un 3,8%, aunque la responsable ha destacado el papel que la fuerte subida de la carne de cerdo y los productos cárnicos han tenido en el IPC.

Esto se debe a que de octubre de 2018 a octubre de 2019 se han incrementado en un 101,3%, suponiendo casi dos tercios del incremento del IPC, según la responsable.

Liu señaló que el crecimiento del IPC del país sigue siendo "leve" este año, aumentando un 2,6 por ciento interanual en los primeros 10 meses, dentro del objetivo del 3 por ciento establecido por el gobierno.

Ante esta situación, el gobierno no deja de implementar medidas para frenar la fuerte subida de estos productos, de los más demandados en la cesta de la compra de los consumidores chinos. Una de las medidas son las ayudas a los productores para recuperar la cabaña de porcino y poder asegurar el suministro de este alimento. Además, se ha apostado por el incremento de la producción de otras carnes como la de aves e incluso se ha puesto carne en el mercado que estratégicamente el gobierno mantenía en almacenes frigoríficos.

Los datos oficiales mostraron que la carne de cerdo importada en el país alcanzó alrededor de 1,33 millones de toneladas durante los primeros tres trimestres, un 43,6% más que en el mismo periodo de 2018.