José Félix Lafaurie, presidente de Fedegán, ha pedido a la Superintendencia de Industria y Comercio, a las secretarías de gobierno y a los directores de justicia de los municipios, que se realice una revisión y control sobre la especulación con el precio de la carne de vacuno en Colombia. Según Lafaurie, "mientras a los ganaderos les pagan menos por sus bovinos, el precio de la carne al consumidor sube".

Así, entre enero y la primera semana de agosto de este año el precio del kilo del novillo gordo en pie cayó 12,5 %, pero que en ese mismo periodo el valor de la carne de vacuno se incrementó en un 3,9 %.

Apuntó que estas cifras le quitan peso a los argumentos de las propuestas de prohibir la exportación de ganado para aumentar la oferta interna y, por esta vía, hacer bajar el precio de la carne, y por otra, que algunas plantas de sacrificio tengan mayor volumen de sacrificio.

"¿Por qué mientras se deprime el precio del novillo gordo para la venta, los consumidores no se benefician y, por el contrario, pagan más por este producto esencial en la canasta familiar? ¿Hay especulación?", plantea el líder gremial.

“Cuando en el país se han presentado bajonazos en el valor de los novillos en pie, esa reducción nunca se traslada al comprador de proteína bovina”, así lo revela un análisis realizado por la Oficina de Planeación y Estudios Económicos de la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán). Por ejemplo, en 2018 y parte de 2019 el precio del kilo del novillo gordo en pie cayó 14 % (mayo de 2018 a febrero de 2019), pero el valor al consumidor de carne se incrementó 1,1 %.