Viernes, 15 de noviembre de 2024
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La FAO y el Ministerio de Agricultura cubano trabajan en lograr que las fincas ganaderas tengan más resiliencia climática
La FAO y el Ministerio de Agricultura cubano trabajan en lograr que las fincas ganaderas tengan más resiliencia climática
El Ministerio de Agricultura de Cuba, en colaboración con la
Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la
Agricultura (FAO), está promoviendo el desarrollo de fincas
ganaderas más resilientes al cambio climático en Cuba a través del
proyecto IRES.
Financiada por el Fondo Verde para el Clima, esta iniciativa tiene como objetivo aumentar la capacidad de 7 municipios del país para adaptarse a los efectos del cambio climático, mediante la implementación de prácticas agroforestales, forestales y silvopastoriles.
IRES no solo se enfoca en mejorar los rendimientos de leche y carne, sino que también busca garantizar una fuente estable de empleo y mejorar la calidad de vida de los hogares.
Como parte de este proyecto, se están aportando molinos eléctricos para fincas ganaderas del país, lo que facilitará el procesamiento eficiente de grandes cantidades de alimento en poco tiempo. Esto permitirá alimentar a un mayor número de animales, mejorando la digestión y absorción de nutrientes, lo que se traduce en una mejor salud y productividad para el ganado.
Este año, se prevé la restauración de 20,000 hectáreas de sabanas naturales con escasa precipitación, así como suelos y pastizales degradados. Para lograrlo, se implementarán 2,000 kilómetros de cercas eléctricas para ganado vacuno, complementadas con la adquisición de 200 kits de 10 kilómetros de paneles fotovoltaicos. Esta combinación, junto con cercas vivas, permitirá una mejor distribución del ganado, el crecimiento de los pastos y una reducción en el uso de cables convencionales.
Además, el proyecto proporcionará diversos insumos a los ganaderos, como kits de inseminación y otros implementos para el ordeño de los animales.
Financiada por el Fondo Verde para el Clima, esta iniciativa tiene como objetivo aumentar la capacidad de 7 municipios del país para adaptarse a los efectos del cambio climático, mediante la implementación de prácticas agroforestales, forestales y silvopastoriles.
IRES no solo se enfoca en mejorar los rendimientos de leche y carne, sino que también busca garantizar una fuente estable de empleo y mejorar la calidad de vida de los hogares.
Como parte de este proyecto, se están aportando molinos eléctricos para fincas ganaderas del país, lo que facilitará el procesamiento eficiente de grandes cantidades de alimento en poco tiempo. Esto permitirá alimentar a un mayor número de animales, mejorando la digestión y absorción de nutrientes, lo que se traduce en una mejor salud y productividad para el ganado.
Este año, se prevé la restauración de 20,000 hectáreas de sabanas naturales con escasa precipitación, así como suelos y pastizales degradados. Para lograrlo, se implementarán 2,000 kilómetros de cercas eléctricas para ganado vacuno, complementadas con la adquisición de 200 kits de 10 kilómetros de paneles fotovoltaicos. Esta combinación, junto con cercas vivas, permitirá una mejor distribución del ganado, el crecimiento de los pastos y una reducción en el uso de cables convencionales.
Además, el proyecto proporcionará diversos insumos a los ganaderos, como kits de inseminación y otros implementos para el ordeño de los animales.
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