Este crecimiento se explica más por el moderado aumento de precios (0,9%), que por el alza de las ventas (0,6%), según el último anuario sobre consumo realizado por Nielsen.

La consultora apunta que en el conjunto de los gastos de los hogares destacan sobre todo los productos frescos, que representan el 34,1% del total; seguido de la alimentación seca (22,9%) y el segmento de refrigerados, congelados, charcutería y quesos (17,9% del gasto).

Para Nielsen, la alimentación envasada es la que hace crecer el mercado, pues el valor de las ventas de refrigerados, congelados, charcutería y quesos aumentó en 2011 un 3,5%.