La Confederación de Organizaciones Empresariales del Sector Cárnico, Confecarne, ha mantenido una reunión con Valentín Almansa, director general de Sanidad de la Producción Agraria del MAGRAMA, en la que estuvieron presentes sus secretarios generales, Miguel Huerta y Josep Collado. También estuvo presente Emilio García Muro, subdirector general de Acuerdos Sanitarios y Control en Frontera, para abordar los principales temas relacionados con el desarrollo del comercio exterior, un asunto de importancia estratégica para la industria cárnica.

Los representantes de la industria cárnica mostraron la importancia de las exportaciones del sector cárnico durante 2011: 1,40 t millones de toneladas de carne fresca y congelada y 116.000 t de elaborados cárnicos, por un valor cercano a los 3.644 millones de euros.

Valentín Almansa mostró el apoyo que desde el MAGRAMA están dando al sector afirmando que se ha creado una dirección general, la que representa, en la que se agrupan las subdirecciones de Sanidad Animal, Vegetal y Acuerdos Sanitarios, se va a centrar en la apertura de mercados e impulso de las exportaciones. Entre sus competencias está la definición de los criterios para la elaboración de las listas de establecimientos autorizados para la exportación a países terceros, así como la eliminación de los obstáculos para la apertura de mercados en el exterior.

También afirmó que próximamente se va a revisar la Lista Marco, en la que estarán incluidas las empresas que cumplan una serie de requisitos y que será ofrecida a aquellos países que pidan listas de exportadores, tanto si es por una visita de países terceros o como si es por la aportación de un listado por parte de las autoridades españolas. En esta lista revisada se establecerán requisitos adicionales que garanticen un enfoque profesional del comercio exterior por parte de los operadores.

Confecarne se mostró satisfecha con estos avances pero exigió también un avance en cuestiones como la autorización de un mayor número de empresas para la exportación a EE.UU. y la necesidad de simplificar los requisitos documentales que se exige a las empresas que exportan sobre todo en el proceso de control posterior a la exportación.

Los representantes de la industria cárnica mostraron también el interés del sector por realizar un estudio sobre eliminación de patógenos en los jamones curados, similar al que se realizó para demostrar la inactivación de los riesgos sobre aspectos de sanidad animal en los jamones.