Unos 30 expositores de toda la geografía española mostraron y vendieron los mejores productos alimentarios, desde los embutidos de Castilla y León, hasta las anchoas de Cantabria, pasando por el aceite de oliva, y la empanada gallega, entre otros.

La variedad de productos es una de las características de esta muestra, y el visitante puede elegir entre todos los alimentos, que tienen un denominado común: la calidad. Así, se podían adquirir también licores, miel, garbanzos, pasteles, quesos, galletas, vino, bacalao, y productos típicos de Galicia, entre los que ha destacado el pulpo. Mucho público y buenas ventas. Así se puede resumir la octava edición de la Feria de Alimentación.

El alcalde de Fuentepelayo, Daniel Torrego, valoraba el desarrollo de la muestra, con un recinto lleno, sobre todo las tardes del sábado y el domingo. Son numerosos los vecinos de los pueblos de alrededor y también los profesionales de la provincia que eligieron desplazarse hasta Fuentepelayo y degustar y comprar las exquisiteces que allí se han visto.

El balance de los expositores también fue positivo. Para algunos ha sido su primera vez esta edición, pero los buenos comentarios de sus compañeros sobre Fuentepelayo les animaron a participar en una muestra ya consolidada.