Sin embargo, un estudio elaborado por la empresa de investigación del mercado NPD Group, estima que hay una diferencia sustancial entre las preocupaciones de los consumidores sobre el contenido de sal de sus dietas y el consumo que hacen de productos bajos en sal o totalmente sin sal.

El estudio afirma que la importancia del contenido de sal en los alimentos no es tan importante como hace 20 años, pero ha repuntado últimamente. Sin embargo el número de personas que demandan productos libres de sal o con bajo contenido se ha reducido de forma continua, según el informe NPD's National Eating Trends que ha analizado cómo ha evolucionado la demanda de alimentos por parte de los americanos en los últimos 30 años.

Uno de los apartados del informe analiza el futuro de los hábitos de consumo de los americanos. Se estima que seguirá la tendencia a reducir la sal en los alimentos durante la próxima década.