Así lo han explicado representantes de "Calidalia" durante un encuentro celebrado en Madrid para celebrar el décimo aniversario de la entidad, que agrupa a 24 compañías, la gran mayoría, del sector de la alimentación, con una facturación conjunta de 12.000 millones de euros y 45.000 trabajadores.

Este planteamiento contrasta con el exhibido por algunas cadenas de distribución, que han anunciado que a priori no repercutirán la subida en sus precios.

El vicepresidente de González Byass, Pedro Rebuelta, ha indicado que "desde nuestro punto de vista, esta subida de impuestos tiene que reflejarse en el precio". También ha explicado que las empresas de alimentación llevan "dos o tres años trabajando en el ahorro de costes" para adaptarse a las circunstancias del mercado, pero que "la clave es la calidad del producto" y no quieren "ponerla en juego".

"No nos resistiremos a la subida del IVA, porque si eso se traduce en vender más barato, lo tendríamos que sacar de algún sitio, apretando a nuestros proveedores o incluso a nuestros trabajadores en la negociación de los convenios colectivos", ha añadido por su parte el consejero de Freixenet Enrique Hevia. Además ha reconocido que el principal "choque" entre la industria y la distribución en España se debe a las "marcas blancas", bajo las que, en su opinión, se venden "productos similares" a los suyos, "a un precio que no se puede entender".

Respecto al impacto en el consumidor de la crisis o de las últimas medidas económicas adoptadas por el Ejecutivo, el propietario de Grefusa, Agustín Gregori, ha apuntado que "lo que cambia es la composición del consumo; la gente suele evitar comprar bienes duraderos o de precios elevados, pero tiene que comer y beber, y va a seguir siendo así". Los miembros de Calidalia son Leche Pascual, Gallina Blanca, Nutrexpa, González Byass, Chupa Chups, Delaviuda, Gallo, Helios, Lacasa, Panrico Donuts, Grupo SOS, Freixenet, Vichy Catalán, García Baquero, Borges, Campofrío, Torres, Valor, Seda volubles, Grefusa, Casa Tarradellas, Grupo Codorniu, Esteve y Antonio Puig. La entidad funciona, fundamentalmente, como una "central de compras" que mueve 500 millones de euros anuales, y entabla relación con los proveedores para adquirir de forma conjunta productos de una determinada categoría en mejores condiciones.