Espinosa y el comisario europeo de Sanidad, John Dalli, han afirmado, en rueda de prensa, que antes de pensar en revisiones sobre ese tipo de normativas es necesario que los países apliquen las actuales reglas que ya existen en la Unión Europea, porque no se están cumpliendo. Bruselas proyecta revisar la legislación acerca del transporte animal, pero no tiene una fecha para ello.

La ministra ha señalado que en la UE a veces se cambian las normas a "demasiada velocidad" y que teniendo una regulación sobre bienestar animal es conveniente "parar" e intentar que todos los países las respeten. Como ejemplo, Espinosa ha mencionado que cuando se pusieron en marcha las reglas sobre la identificación electrónica de ovejas y cabras, para los países con una cabaña ganadera importante como España supuso un "sacrificio de inversión y de esfuerzo", conjuntamente con el cuerpo veterinario nacional.

En ese sentido, ha apuntado que cuando ya finalizó ese sistema de seguimiento, otros países pidieron que se aplazara la fecha límite para su entrada en vigor, con lo que pese a que la UE es un mercado único se produjo un "desequilibrio" entre los que ya hicieron los esfuerzos y los que no. "En el transporte (de ganado) es una situación similar, revisemos que las normas están funcionando, pues no es normal cambiarlas cuando a lo mejor los Estados miembros no han aplicado las iniciales".

La ministra, en nombre de la presidencia española de la UE, y el comisario inauguraron la Semana Veterinaria Europea, que comenzaron en Bruselas con unas jornadas sobre la identificación del ganado y el seguimiento de los productos animales durante toda la cadena alimentaria.

Por otra parte, el comisario ha destacado la mejora en la UE de la erradicación de las Encefalopatías Espongiformes Transmisibles (EET), por lo que sería posible relajar ciertas normas en este sentido, sobre todo las relacionadas con los test de detección de tales enfermedades.

Espinosa ha resaltado la preparación del modelo de la UE sobre trazabilidad de los productos, "de la granja a la mesa" y ha apuntado que hay que saber explicarlo a los consumidores, así como fuera de las fronteras europeas, para que "ese esfuerzo sea reconocido y retribuido adecuadamente".