En el marco de la X Edición de los Cursos de Verano 2010 de la Universidad de Alcalá, "Hábitos de vida cardiosaludables. Alimentación fisiológica, ejercicio y psicología positiva", celebrada los días 6 y 7 de julio, el dr. Antonio Villarino ha expuesto los beneficios que la carne de conejo tiene en mujeres de más de 40 años, resultantes del estudio realizado por investigadores de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (SEDCA), para valorar los principales aspectos analíticos que pueden mejorarse con la ingesta de carne de conejo.

De este estudio puede deducirse que el consumo de carne de conejo produce un descenso significativo de los niveles de ácido úrico, siendo una carne apta para personas que padecen gota o hiperuricemia. Además, del estudio puede observarse un descenso del Índice de Masa Corporal, lo que convierte a la carne de conejo en un alimento idóneo para incluir en los planes de adelgazamiento de la población por su bajo contenido calórico, apenas 131 kcal/100 g, y bajo contenido graso (5,3 g/100g).

La carne de conejo es adecuada para todas las edades y situaciones fisiológicas, ya que contiene un alto contenido en proteínas de elevado valor biológico, y además aporta un alto contenido en fósforo, es fuente de selenio y potasio, y contiene importantes minerales como el hierro, el zinc, el magnesio, así como vitaminas del grupo B entre las que destaca por su alto contenido en cianocobalamina (B12), niacina (B3) y piridoxina (B6). Dada su fácil digestibilidad, la carne de conejo es, además, especialmente adecuada para aquellas personas con problemas gastrointestinales. De hecho, según la Organización Mundial de Gastroenterología (WGO), este tipo de carne está recomendada para el tratamiento de los problemas digestivos.