Así lo ha indicado el secretario de organización de Unións Agrarias (UU.AA.), José Rodríguez, en conferencia de prensa, en la que vinculó la "mala" ordenación territorial con al proliferación de incendios y los ataques de alimañas a las explotaciones y cultivos. Rodríguez apuntó que el 70% del territorio gallego es rural, pero está gestionado únicamente por un 15% de la población, de la cual el 37% tiene más de 65 años. Remarcó el "excesivo" gasto que supone la prevención de incendios en Galicia como una inversión media, sólo en políticas preventivas, de 90 euros por hectárea.

Para Rodríguez, la solución pasa por incentivar la presencia de ganado bovino en el monte, que realizaría tareas de desbroce, con lo que contribuiría a disminuir el número de incendios y de alimañas. Para avalar esta afirmación contrapuso los datos de dos ayuntamientos: A Gudiña en Ourense y Sarria en Lugo, que cuentan con 37 y 626 explotaciones, respectivamente, y el número de hectáreas quemadas fue de 930 en el municipio orensano y 27 en el lugués.