Tras inscribir en el Registro de Marcas de la Oficina Española de Patentes y Marcas, el Ayuntamiento ha procedido a la regulación de las condiciones de uso, “sólo por las personas que cuenten con la correspondiente autorización municipal”. El reconocimiento de uso se dará por cinco años, correspondiendo únicamente al consistorio la realización de las campañas de promoción y difusión de ambos distintivos.

Para la concesión del uso se creará una comisión encargada de examinar las solicitudes presentadas y de dictaminar, teniendo en cuenta entre otras consideraciones el origen, o la vinculación de los productos que se deseen publicitar, con Monesterio. Además quien posea la facultad de utilizar las marcas deberá estar en disposición de participar en los distintos eventos promocionales organizados desde el Ayuntamiento, y tendrá la obligación de abonar el canon que se establezca.

Las utilidades de las marcas se otorgarán exclusivamente para “individualizar productos o servicios, indicar a los consumidores el origen y la calidad de los productos y servicios, y para realizar y reforzar la función publicitaria”.