El presidente de la Asociación de Industrias de la Carne de España-Grupo de Ibérico (Iberaice-Aice), Julio Revilla, ha indicado que se prevé que esta Navidad el número de piezas vendidas de jamón ibérico sea similar al año anterior, aunque no así el nivel de precios. En este sentido, ha explicado que en el caso del jamón de cebo han subido ligeramente los precios respecto al año pasado, cuando había excedente y se produjeron grandes ventas, que se prolongaron también en los primeros meses de 2010.

En la actualidad, comienza a haber una cierta normalización en las ventas de jamón de cebo, ha apuntado. Según ha precisado, la falta de financiación de los bancos y la caída del consumo en 2008 y 2009, hicieron que los fabricantes comercializaran este producto a un precio de entre 7 y 8 euros el kilo, aunque en estos momentos han remontado hasta los 10 euros el kilo.

En el caso del jamón de bellota, se había notado menos la crisis hasta ahora porque su tiempo de curación es al menos un año mayor que el de los de cebo y se había conseguido que la llegada de la denominada "burbuja" del ibérico no se produjera ni en 2008 ni en 2009, sino a finales de 2009 y en 2010.

Revilla ha detallado que el jamón que se sacará a la venta procede de la campaña de cerdo tan enorme y cara de 2006 para 2009, y de 2007 para 2010. "Aquí es donde se está produciendo el gran drama del sector del ibérico, porque los fabricantes, acuciados de nuevo por la misma situación de falta de liquidez y de financiación, tienen que malvender su producto", ha señalado. Según el presidente de Iberaice-Aice, el jamón ibérico de bellota se está comercializando por debajo de los 20 euros frente a los 25, 30 euros o más registrados en los 2006, 2007 y 2008.

"Otra gran cuestión" es cómo se transmite al público este producto, y si las grandes superficies disminuyeron el precio del jamón ibérico de cebo; en el caso del de bellota, que se comercializa principalmente a través del canal Horeca, no ha habido un descenso de los precios, ha asegurado. En su opinión, "esa necesidad y ese esfuerzo no se está trasladando al consumidor, porque los precios finales siguen invariables cuando las cotizaciones del fabricante han bajado en torno a un 35%".

En el caso del ibérico de cebo, se alcanzó una cabaña de 4 millones de cerdos en 2006 y 2007, cuando a finales de los 90 era sólo de 2,5 millones. En ibérico de bellota se ha pasado de 400.000 ó 500.000 cerdos a más de un millón en 2006 y 2007 y "ha originado una burbuja; el sector no va a tener más remedio que regularse".

Respecto a las ventas, Revilla ha destacado que en España se compran aproximadamente entre 4,5 y 5 millones de piezas de jamones en todo el año, de los que un 60% se comercializan entre septiembre y diciembre. En cuanto a los embutidos y carnes, ha subrayado que cuentan con una "enorme" demanda y que los precios están funcionando muy bien, e incluso se sitúan por encima de los que se comercializaban anteriormente.