La Unión Europea (UE) ha alcanzado, este junio, un acuerdo político para la revisión de las disposiciones relativas a los controles oficiales en toda la cadena alimentaria, que lleva a normas más eficaces para el cumplimiento de la legislación agroalimentaria. El objetivo es lograr un sistema de control más simple y más eficaz para la seguridad almentaria, los requisitos veterinarios y fitosanitarios, la producción ecológica y la producción amparada por figuras de calidad.
 
Esta regulación forma parte de un paquete con importantes revisiones. Las nuevas reglas contribuirán muy significativamente a modernizar y fortalecer los controles que efectúan las autoridades públicas y luchar contra las prácticas fraudulentas que perjudican a los consumidores y empresas que respetan la ley.
 
El nuevo marco de trabajo permitirá que los requisitos de las acciones de control se ajusten a lo largo del tiempo a las nuevas tecnologías, los nuevos sistemas de producción o hábitos de consumo, y los nuevos peligros y riesgos alimentarios. También se crearán las condiciones para lograr avances importantes en el ámbito del bienestar animal.
 
La nueva normativa que se está preparando prevé ampliar el ámbito de aplicación del Reglamento (CE) 882/2004 sobre los controles oficiales a la sanidad vegetal, material de reproducción vegetal y subproductos animales para cubrir toda la cadena agroalimentaria. También permitirá adoptar requisitos oficiales de control ajustados a las necesidades específicas de cada actividad como por ejemplo, la inspección de la carne, los controles sobre los productos ecológicos, los controles de bienestar de los animales, etc.

De esta forma se incrementará la transparencia de las actividades de los controles oficiales efectuados por las autoridades nacionales y se podrá, bajo determinadas condiciones, hacer pública determinada información de lo resultados de constroles llevados a cabo, estableciendo sistemas de calificación.

Se prevé también ampliar las tasas para la mayoría de los controles oficiales para garantizar que los Estados miembros dispongan de recursos adecuados para financiar sus autoridades de control a través de cuotas a los operadores, exceptuando las microempresas. También se crerá un marco común para la realización de los controles fronterizos de animales y mercancías que entran en la UE;
 
Se busca además modernizar los sistemas de gestión de datos e información sobre los controles oficiales. Para ello, un nuevo sistema integrará todos los existentes y futuros y permitirá el uso de certificados electrónicos y firmas electrónicas.

En cuanto a las sanciones económicas a imponer, estarán fijadas en cantidades que compensarán el beneficio económico que el autor esperaba obtener por el incumplmiento de la ley, a fin de garantizar el carácter disuasorio de la sanción.