Pedro J. Domínguez, director de Ventas de Nielsen España, ha participado en el Congreso Aecoc de Productos Cárnicos y Elaborados que celebra su decimoséptima edición de nuevo en Lleida. De acuerdo con los datos presentados por Domínguez, dentro del gran consumo el gasto en carnes y productos cárnicos creció un 0,8% durante 2016 hasta los 13.000 millones de euros.

Si diferenciamos categorías, vemos cómo el valor de las compras de carne fresca se mantuvo estable frente al crecimiento de otras categorías de frescos, como el caso de las frutas y verduras que crecieron el 8,6% y el 4,5%, respectivamente. Dentro del amplio mostrador de carne, dos terceras parte del gasto se corresponden con pollo y cerdo, aunque muestran una tendencia a la baja. Por su parte, el vacuno, que es el 14%, se mantuvo estable; mientras que el cordero ganó presencia en la cesta de la compra, aunque de momento es sólo un 5%  de las ventas de carne fresca.

Frente a esto, la categoría de derivados cárnicos creció un 2,1% en el valor de sus ventas. Para Domínguez esto se debe al Consumer Sapiens que está haciendo evolucionar el mercado hacia tres ejes principalmente: salud, premium y conveniencia.

El ejemplo para el segmento salud es la carne de pavo y los derivados que con ella se elaboran: sigue creciendo y supone ya el 15% del gasto en charcutería, acercándose al jamón cocido o al serrano. Estos dos se mantienen en la cesta de la compra y entre ambos suman una tercera parte del consumo en elaborados cárnicos, tal y como podemos ver a continuación.

En cuanto a lo premium, para Domínguez es otro de los ejes de crecimiento ya que tres de cada diez consumidores están predispuestos a pagar un poco más por carnes de primera. Un ejemplo son las salchichas premium, que aumentaron sus ventas un 8%. Aquí se incluirían especialidades, como las alemanas, por las que el consumidor sí está dispuesto a hacer un esfuerzo económico, ya que su precio es 2,5 veces superior a la media de la categoría.

Y, por último, la conveniencia consiste en productos tales como el el pollo asado refrigerado, loncheados ibéricos o pasta para sándwiches son tendencia junto con salud y alta gama. Según Domínguez, "el consumidor de hoy lo quiere fácil, siente que tiene que cuidarse y se da un gustazo con cada vez mayor frecuencia. Evoluciona su consumo de carne al tiempo que evoluciona como consumidor, es un Consumer Sapiens, más experto que nunca”.