En un acto que ha contado con la presencia de Marco Tschanz, director financiero de Bell Food Group, además de otros directivos de la empresa en Suiza y también en España, se ha procedido a colocar la primera piedra de las nuevas instalaciones que Bell Food Group, a través de su filial Sánchez Alcaraz en España, está construyendo en la localidad toledana de Fuensalida.

Durante la presentación del acto, el director financiero de la compañía cárnica suiza destacó que su grupo actualmente posee en Europa en torno a 10.000 trabajadores y su facturación asciende a cerca de 3.500 millones de francos suizos. Así mismo, destacó que su deseo es permanecer en nuestro país para seguir desarrollando su actividad a través de las instalaciones cuya construcción están iniciando así como los secaderos que ya poseen en tanto en Casarrubios del Monte, también en la provincia de Toledo, como en Azuaga a través de la reciente compra de Nobleza Ibérica.

Tschanz destacó también que la nueva planta que van a construir tendrá una extensión de 66.000 metros cuadrados y permitirá curar en torno a 1 millón de piezas. También habrá zonas dedicadas al deshuesado, loncheado y envasado del producto. Aseguró que se trata de la planta más grande que Bell Food Group ha construido hasta ahora. Supondrá una inversión de 40 millones de euros y permitirá la creación de cerca de 100 puestos de trabajo, además de otros muchos indirectos. Las piezas que saldrán de estas nuevas instalaciones se comercializarán bajo la marca Sánchez Alcaraz y tendrán como destino el mercado nacional además de la Unión Europea.

El presidente de la Junta de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, intervino también en el acto para hablar de los logros políticos de su gobierno atrayendo inversiones para la región.