La industria porcina canadiense está un paso más cerca de tener acceso a la Unión Europea ya que la Agencia Canadiense de Inspección de Alimentos (CFIA) ha resuelto el problema principal que impide que la industria porcina se beneficie del Acuerdo Económico y Comercial Global entre la UE y Canadá (CETA).

Los cambios en el Manual de Procedimientos de la CFIA se realizaron la semana pasada para permitir a la industria cárnica etiquetar con una marca sanitaria después del congelado de la carne de cerdo. La disposición anterior requería que la etiqueta se aplicara a las cajas antes de que el producto fuera destinado a la exportación, lo que impidió que la industria se beneficiara del Acuerdo Económico y Comercial Global entre la UE y Canadá que entró en vigencia provisional el 21 de septiembre.

"El Canadian Pork Council agradece a la CFIA por revisar su política en torno a las etiquetas de marca sanitaria", dice Rick Bergmann, presidente del CPC. "La eliminación de esta barrera permite aumentar las ventas, lo cual es de suma importancia para nuestro sector porcino".

De acuerdo con Neil Ketilson, presidente de Canada Pork International, "sería muy beneficioso para Canadá si los productores de carne de cerdo pudieran establecer rápidamente la base para una presencia a largo plazo en el mercado europeo".

"La industria y el gobierno deben centrar sus esfuerzos en lograr que la UE apruebe el conjunto completo de intervenciones antimicrobianas utilizadas en Canadá para mejorar la seguridad alimentaria", dice Chris White, presidente y director general del Canadian Meat Council. "Estas intervenciones han sido aceptadas por las autoridades de seguridad alimentaria de Canadá, Estados Unidos, Japón y muchos otros países".