La familia Sánchez Sánchez, fundadora y propietaria de la empresa Jamones Aljomar, ha sido distinguida con el XVII Premio Familia Empresaria de Castilla y León, que anualmente otorga la asociación Empresa Familiar de Castilla y León (EFCL) para reconocer el esfuerzo y trabajo de una familia empresaria de la Comunidad Autónoma.

El jurado valoró especialmente la trayectoria de esta compañía y de sus fundadores, Alfonso Sánchez Bernal y María del Carmen Sánchez Álvarez, que iniciaron su actividad primero con un pequeño colmado familiar en el barrio sevillano de Triana donde vendían productos de su Salamanca natal, para, en 1992, construir una fábrica de jamones y embutidos en Guijuelo, dando origen a Jamones Aljomar.

Desde entonces, y tras 25 años de actividad, Jamones Aljomar se ha situado entre los 10 mayores productores de España, teniendo además una gran presencia internacional en más de 30 países de todo el mundo, factor que también es tenido en cuenta por el jurado en su fallo.

Actualmente, Aljomar tiene una facturación anual de 32 millones de euros y genera más de 300 puestos de trabajo directos e indirectos en el grupo de empresas formado por Jamones Aljomar, la explotación agropecuaria Vera Vieja y el matadero El Navazo, del que es socio. La facturación global del grupo supera los 80 millones de euros; con un crecimiento constante en los últimos años.

El fallo también destaca la apuesta por la calidad y la I+D+ de Jamones Aljomar, con el desarrollo de nuevos productos y grandes proyectos. Es el caso de dos retos en los que trabaja en la actualidad: una gama de embutidos saludables, así como una línea de producción de productos ecológicos.

Por otra parte, la preocupación por la continuidad del negocio familiar, con la incorporación de la segunda generación la dirección de la empresa y la existencia de un protocolo familiar, es igualmente otro de los factores que han hecho a los fundadores de Jamones Aljomar merecedores del XVII Premio Familia Empresaria de Castilla y León.