La persistencia de la sequía en Australia que ha supuesto un mayor número de sacrificios de animales junto al crecimiento sostenido en la demanda de carne de vacuno y la depreciación del dólar australiano han llevado a que este país exportara en 2018 1,12 millones de t de este producto. Esto supone 110.000 t, un 11% más, que en 2017. La cifra no es la más alta que ha alcanzado el país ya que en 2014 y 2015 sumó 1,28 millones de t.

Cabe destacar la subida en las importaciones de China sumando 162.000 t, un 48% más que en 2017. Esta subida muestra que el destino de las exportaciones australianas está variando hacia países asiáticos y no tanto a Estados Unidos donde estaba centrada hace unos años.

Tres países (EE.UU., Japón y Corea del Sur) suponen un total de 717.000 t de las exportadas por Australia, el 63% del total, habiéndose rebajado esta participación respecto al 68% que suponía en 2017.