Espuña, multinacional especializada en la producción de embutidos anuncia el relevo generacional de la compañía. Mañana se celebra el acto conmemorativo durante el cual Esteve Espuña asumirá oficialmente la gerencia de la empresa, después de que Xavier Espuña haya estado al frente de la empresa familiar durante 43 años.

“Bajo la dirección de mi padre, Espuña ha desarrollado una distribución organizada y ha perfeccionado la técnica de la charcutería envasada, garantizando la máxima seguridad alimentaria en sus procesos de fabricación. Además, inició un proceso de internacionalización e incrementó las capacidades productivas con la inauguración de dos fábricas y la apertura de nuevos centros en Argentina y EE. UU.”, ha explicado Esteve Espuña.
“Su liderazgo y el compromiso de toda la organización ha permitido a la empresa alcanzar unas cotas de crecimiento y expansión que nos han posicionado como un referente en el sector. En 2018, facturamos 83 m €, lo que supone un crecimiento del 7% respecto a 2017, y hemos expandido nuestra actividad a más de 45 países, entre los que figuran los países más exigentes como EEUU, Japón o Corea”, concluye Esteve.
  Renovación en la cúpula directiva con vistas al futuro

Esteve Espuña se incorporó a la multinacional familiar en 2014, después de acumular experiencias profesionales en el mercado extranjero, trabajando para Samsung en Corea, o en el nacional, donde ocupó posiciones de responsabilidad en la ingeniería de diseño electrónico Draco Systems, entre otras compañías.

Entre los proyectos que forman parte del nuevo plan estratégico medio plazo, se incluyen consolidar el liderazgo de Espuña en el mercado de Jamón Curado Loncheado, con una fuerte apuesta por la sostenibilidad en el envasado, o desarrollar el negocio de platos pre-cocinados refrigerados, “un mercado en crecimiento por el que hemos decidido apostar para ofrecer a los consumidores recetas más saludables y naturales”, apunta Esteve Espuña.

Finalmente, reforzar el crecimiento de la empresa en los países estratégicos para la exportación, como Francia, Alemania, Reino Unido, EE. UU y Canadá. “A medio plazo, esperamos triplicar la facturación en América del Norte y alcanzar los 10 millones de euros”, apunta Esteve Espuña.   La planta de producción de Espuña en Utrillas se inauguró en el año 2006. En los últimos 10 años esta planta se ha visto ampliada en dos ocasiones, lo que le ha permitido pasar de 25 a 97 empleados – de los que el 61% son mujeres- en unas instalaciones que actualmente ocupan algo más de 10.000 metros cuadrados.

Por su parte, la compañía adquirió un terreno de 36.700 metros cuadrados en Mezquita de Jarque donde tiene previsto construir una planta productiva, todavía en fase de estudio.

La empresa tiene previsto continuar invirtiendo en ambas factorías en los próximos ejercicios con el objetivo de continuar liderando el mercado de jamón curado.