Campofrío Food Group, una de las principales firmas cárnicas de nuestro país de la que la totalidad de sus acciones están en manos de la mexicana Sigma Alimentos, logró en 2018 incrementar sus ventas en un 2,5% hasta los 2.052 millones de euros. Esto se debió fundamentalmente al incremento de la venta a terceros países ya que las ventas en el continente europeo mantuvieron la estabilidad, según sus cuentas en el Registro Mercantil recogidas por Expansión.

Durante el pasado año, la empresa tuvo un deterioro de sus activos de 75,8 millones de euros debido fundamentalmente a la necesidad de invertir en su firma Fiorucci en Italia, la continuidad en el proyecto de ampliación de la planta de La Bureba en Burgos, en la que invirtió otros 50,6 millones de euros y otras inversiones en plantas de Francia y Rumanía. Además también durante este 2019 cesará la actividad de su planta de Deventer en Holanda.

Durante el pasado ejercicio la compañía redujo su deuda finanicera que pasó de 308,8 a 277,5 millones de euros y mejoró su posición de caja de 229 a 299 millones de euros.

El resultado del ejercicio arrojó unas pérdidas de casi 68 millones de euros y si tan solo se contabilizara la actividad de la división del sur de Europa las pérdidas rondarían los 109,8 millones de euros.