La planta de Brf en los Emiratos Árabes Unidos, la primera en Abu Dhabi en producir alimentos de proteína animal a gran escala, reutilizará el 100% del agua tratada en las operaciones de su fábrica. El recurso será reutilizado en el proceso de enfriamiento de fábrica y riego de los jardines. Con esto, la compañía dejará de consumir 72.000 metros cúbicos de agua al año que le suponen un coste de 130.000 dóalres. El proyecto fue desarrollado en colaboración con Water Engineering Technologies (WET).

El método utilizado para purificar el agua es la ósmosis inversa. A través de esta tecnología, todos los componentes sólidos se eliminan del agua, que puede reutilizarse en el proceso de enfriamiento de la fábrica o para el riego de los jardines. Esta misma solución ya se ha implementado en las plantas de Brf en Turquía, generando un ahorro anual de 70.000 dóalres y de 50.000 metros cúbicos de agua.

"Además de la ganancia financiera, la adopción de la nueva tecnología nos brinda un beneficio ambiental, ya que vamos a hacer un uso más consciente del agua en un país que se construyó en medio del desierto", explica Giovani Pelliza, gerente industrial de fábrica de Brf en Abu Dhabi. "La innovación, la calidad y la seguridad de nuestros procesos son fundamentales para el éxito del negocio. Encontrar alternativas en el mercado que nos ayuden a mejorar nuestras actividades es un ejercicio diario ", dice el ejecutivo.

Con poco más de cinco años, la planta de BRF en Abu Dhabi es una de las más modernas de la empresa y emplea a más de 530 personas. Produce hamburguesas, salchichas, pechuga de pollo marinada, empanadas de pollo y cortes especiales de pollo. Los productos se comercializan bajo las marcas Sadia, Hilal y Perdix, con materia prima proveniente de Brasil. Además de satisfacer la demanda de los Emiratos Árabes Unidos, la unidad también exporta a otros países, como Arabia Saudita, Omán y Kuwait.

A principios de este año, la planta de BRF en Abu Dhabi también implementó un nuevo sistema de energía basado en el concepto 4.0 de la industria. Además del beneficio financiero, que apunta a generar una economía de 340.000 dólares por año, la iniciativa traerá una considerable ganancia ambiental a la unidad, ya que reducirá las emisiones anuales de CO2 en aproximadamente 1.800 toneladas.