El Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural de la Generalitat de Catalunya ha impulsado las obras para minimizar los olores y ruidos del matadero de Manlleu con el objetivo de garantizar su viabilidad y sostenibilidad a largo plazo. El desarrollo urbanístico del municipio y del marco normativo aplicable a la actividad han comportado que el matadero haya tenido que llevar a cabo algunas medidas correctoras para adaptar su actividad al contexto social que le rodea.

Las medidas adoptadas han permitido, por ejemplo, el confinamiento de la nave industrial y la mejora tanto en la carga y descarga como en la logística de manejo de estas operaciones para hacerla compatible con el emplazamiento donde se encuentra y evitar así el su cese.

El director general de Empresas Agroalimentarias, Calidad y Gastronomía, Joan Gòdia, ha destacado durante la visita que ha hecho al matadero que “la apuesta decidida del Departamento por ayudar a esta infraestructura que da servicio a un gran número de ganaderos y carniceros de la zona forma parte de la Estrategia alimentaria de Cataluña, que tiene como uno de los cuatro grandes objetivos disponer de un sistema alimentario propio y arraigado en el territorio.”

En este sentido, la directora general de Agricultura y Ganadería, Elisenda Guillaumes, ha manifestado que el matadero es un “valor a mantener para seguir dando servicio a pequeñas empresas y clientes minoritarios y potenciar así los productos de kilómetro cero y los comercios de proximidad, los cuales se pueden obtener en carnicerías y establecimientos de restauración locales, lo que favorece la economía, la ganadería y la gastronomía local.”

La visita también ha contado con la presencia del director de los servicios territoriales del Departamento en la Catalunya Central, Manel Armengol, así como representantes del matadero.

Un equipamiento clave
Éste es un matadero de proximidad que se dedica al sacrificio de vacuno y ovino-caprino, con sala de despiece anexa, y su continuidad es clave dado que actualmente es el único matadero de ovino y caprino que puede dar servicio de sacrificio con un volumen adecuado en la comarca de Osona y la Catalunya Central, junto con Carniceros del Berguedà, pero éste último es de uso interno para sus clientes.

El resto de mataderos de proximidad con características similares se encuentran a gran distancia como en las Terres de l'Ebre o son mataderos más grandes como los de Sabadell, Sant Cugat, Girona y el Baix Camp donde sus clientes no son pequeños carniceros o ganaderos locales.

La actividad de sacrificio de animales en el municipio de Manlleu en el actual emplazamiento del matadero se lleva desarrollando desde el año 1947 para abastecer de carne a la población. En 1994, la sociedad Matadero Manlleuenc d'Artesans dio continuidad a esta actividad tradicional en régimen de concesión, otorgada por un plazo de 50 años, en funcionamiento hasta la actualidad.

Actualmente, el matadero emplea a 20 personas y sacrifica animales para más de 750 explotaciones ganaderas correspondientes mayoritariamente en la Catalunya Central. En concreto, da cobertura de este servicio a explotaciones de 30 municipios de la comarca de Osona, 3 del Lluçanès, 5 del Moianès, 1 del Bages, 2 del Berguedà, 1 del Solsonès y otros dos municipios del Vallès Oriental y la Garrotxa .

El matadero de Manlleu prevé recibir una ayuda de 229.541,88 euros que supondrá un 42% de la inversión total auxiliable. Esta ayuda, que promueve la Dirección General de Empresas Agroalimentarias, Calidad y Gastronomía del Departamento de Acción Climática, forma parte de la línea de ayudas a la mejora de los procesos de transformación y comercialización de los productos agroalimentarios dotada con 20 millones de euros.