El director del Servicio ruso de Seguridad de Inspección Veterinaria y Fitosanitaria (Rosselkhoznadzor), Serguei Dankvert, y la secretaria general de Agricultura y Alimentación del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama), Isabel García Tejerina, han mantenido un encuentro acompañados por el director general de Sanidad de la Producción Agraria, Valentín Almansa, y diversos funcionarios de estas dos administraciones.

España ha mostrado los avances llevados a cabo por las empresas elaboradoras de alimentos y por las distintas administraciones públicas en la implantación de las medidas necesarias que en su día el Rosselkhoznadzor indicó como necesarias para la reapertura de su mercado a los productos de origen animal español.

Fruto de las negociaciones mantenidas, 9 empresas españolas elaboradoras de lácteos podrán comenzar a exportar sus productos a partir del próximo 18 de marzo con destino al mercado ruso. Así lo anunció Serguei Dankvert en una rueda de prensa posterior ofrecida en la sede del Magrama.

El director del Rosselkhoznadzor valoró positivamente los avances realizados por nuestro país en este sentido y están siendo puestos en marcha planes de control agroalimentario que resultan efectivos tanto en el sector lácteo como en el cárnico.

Respecto a las exportaciones cárnicas, precisamente está en vigor el veto ruso a la importación tanto de ganado porcino como de productos elaborados de este tipo, impuesto a toda la UE con motivo de los casos de peste porcina africana detectados tanto en Lituania como en Polonia cerca de la frontera con Rusia. En opinión de Dankvert este es un tema que aún se está negociando y deberá tener una resolución.

Dankvert insistió en que España estará en primera fila para iniciar las exportaciones, junto a países como Dinamarca, Holanda, Francia e Italia, pero que no puede adelantar un calendario para retomar esas exportaciones porque todo dependerá del desarrollo de las negociaciones con la UE.

De momento las autoridades rusas no han aceptado las propuestas de regionalización de las exportaciones, eliminando las zonas donde se han producido los brotes, hechas por parte de la Unión Europea, en concreto por la directora general de Salud y Consumidores de la UE, Paola Testori. Esta amenazó en su momento a Rusia con elevar una queja ante la Organización Mundial del Comercio.