Tras el escándalo vivido hace os días al conocerse su verdadera situación financiera, la cadena de supermercados Tesco, una de las principales del Reino Unido, está viviendo problemas por la presencia de restos de carne no declarada en algunos de los productos cárnicos frescos que comercializa.

Así, las pruebas de ADN que se venían realizando para determinar la presencia de carne de caballo en productos con contenido de carne de vacuno, han mostrado presencia de carne de pollo y pavo en salchichas de cerdo o carne de cordero en hamburguesas de venado.

De acuerdo con las declaraciones de uno de los portavoces de la firma, sus sistemas de trazabilidad y control de ADN han mostrado que algunos de sus proveedores no han cumplido con sus estándares. Añaden además que están trabajando para verificar dónde se han producido los fallos y enmendar estas situaciones.

Según afirma la empresa en su web el problema habría estado en un lote de salchichas, elaboradas por Tulip, que tenían bajos niveles, entre un 1 y un 5% de otros tipos de carne debido a los distintos tipos que se elaboran al día en los obradores de las empresas cárnicas que les proveen.

En otra de las empresas, 2 Sisters, encontraron hamburguesas de venado en las que había presencia de carne de ovino de entre un 5 y un 30%, lo que le ha llevado a una investigación más detallada en la planta de producción.

Por su parte Stephen Rossides, director de la Asociación Británica de Procesadores de Carne (BMPA) ha manifestado que estas situaciones no plantean riesgos de seguridad alimentaria pero si que representan una violación de las normas de etiquetado por la información que se facilita a los consumidores".