Con el fin de ampliar la oferta de productos que satisfagan las necesidades y expectativas de clientes internacionales, desde hace más de ocho años Fenavi viene trabajando para que el pollo colombiano pueda ser disfrutado por el exigente mercado japonés. Por esta razón, la Federación Nacional de Avicultores de Colombia ha llevado a cabo una misión empresarial organizada con el apoyo de Procolombia, como parte fundamental del proceso para entender y conocer el mercado japonés en términos de tipo de productos, precios, canales, comercializadores y el proceso de importación de los productos avícolas colombianos.

Andrés Valencia, presidente Ejecutivo de Fenavi, comenta que “llevamos a cabo esta misión a Japón con empresarios colombianos para estudiar este mercado, en el que ya contamos con admisibilidad sanitaria para la carne de pollo, lo que nos permitirá hacer contactos con potenciales importadores y además, conocer precios, marcas y gustos en cuanto a los hábitos de consumo en uno de los mercados más exigentes y sofisticados del mundo”.

La misión visitó la Asociación de Pollo de Japón, organización voluntaria de los miembros de las empresas comerciales que promueve las importaciones y exportaciones de carne desde 1994; Ja Chicken Food empresa productora de pollo procesado que permitirá conocer sobre los procesos de calidad exigidos para comercializar carne en el mercado japonés; Nichirei Higashi Ogishima Logistic Center, empresa de logística y de promoción de ventas y Aeon Supermarket, la cadena más grande de supermercados de Japón cuya facturación anual supera los 7.500 millones de dólares; entre otras compañías.

Según cifras publicadas por ALIC (Agriculture & Livestock Industries Corporation) y en estudio de Procolombia, el mercado total de la carne de pollo comercializada en 2012 ascendió a 1.889.571 toneladas con un crecimiento del 3.1% comparado con al año anterior. En el periodo comprendido entre Enero y Noviembre 2013 el mercado estimado fue de 1.717.929 toneladas. Japón es el cuarto productor mundial de huevos de gallina después de China, USA e India.

El consumo per cápita de pollo en Japón durante el año fiscal 2012 (abril 2012 a marzo 2013) se incrementó en un 5% comparado al año anterior, alcanzando los 12 kg por persona y superando por primera vez al consumo de carne de cerdo. En contraste el consumo de carne de res y de cerdo disminuyó ligeramente 100 gramos por persona comparado con 2011 llegando a 5.9kg y 11.8kg respectivamente.

El aumento en el consumo de pollo se debe principalmente a las preferencias de los consumidores japoneses por productos de bajo costo, junto con un aumento en la producción de aves de corral domésticas del 5.7%. La población japonesa ha ido envejeciendo y este tipo de consumidores prefieren consumir un tipo de carne con menor contenido de grasa y más fácil de digerir como el pollo. Aunque la población de Japón está decreciendo se espera que el consumo de pollo se mantenga constante en los siguientes años.

A principios de 2011, los brotes masivos de gripe aviar afectaron la producción de pollo en Miyazaki, el segundo estado productor más grande de Japón, causando gran cantidad de sacrificios de pollos. Adicionalmente el terremoto y tsunami de marzo de 2011 destruyó algunas granjas avícolas las zonas de Tohoku y Kanto afectando la industria avícola del país que vio reducida su producción en un 2.8% durante el 2011

En contraste, en el año 2012 la producción de pollo alcanzó un nivel histórico máximo de 1.456.708 toneladas logrando un crecimiento del 5.7%. Las principales productoras de pollo son: Kagoshima, Miyazaki, Iwate, Ibaraki, Chiba y Aomori.

El corte más apetecido en el mercado japonés es el muslo deshuesado, mientras que la pechuga y otras partes son de menor consumo. Por tal motivo, muchos productores extranjeros de carne de pollo venden la pechuga a los mercados estadounidense y europeo (quienes demandan este corte), mientras que para los países asiáticos exportan el muslo y las alas principalmente. La importación de pollo completo es menos común.

“Nuestro objetivo es llegar a un mercado en el cual 127,6 millones de personas consumen productos avícolas”, concluye Andrés Valencia.