Canadá y México han anunciado la toma de represalias comerciales frente a EE.UU. ante la no retirada de las normas de etiquetado COOL tras la decisión de la OMC.

Por parte de Canadá las medidas podrían tomarse en la importación de productos agrícolas de EE.UU. tales como los chocolates, cereales de desayuno, frutas y patatas. Según estiman las autoridades canadienses, el sistema COOL para el etiquetado de la carne les ha causado unas pérdidas anuales de 1.000 millones de dólares. En el caso de México se tomarán medidas en la importación de frutas, verduras, carne, productos lácteos, entre otros.

Este sistema busca proteger a los ganaderos estadounidenses y para ello solo etiqueta como carne producida en EE.UU. a aquella que procede de animales nacidos, sacrificados y procesados en el país. Frente a esto, con anterioridad se consideraba carne de EE.UU. a la que también procedía de animales criados y engordados tanto en México como Canadá.

Ya en 2012 la Organización Mundial del Comercio había determinado que estas normas son ilegales y que alteran el comercio bilateral.