El gobierno chino ha restado importancia a la reciente alza en el precio del cerdo, después de la preocupación de que el alto precio de la carne en China podría tener implicaciones en la política monetaria, ha publicado la agencia de noticias Xinhua.

El número de cerdos sigue en un "nivel relativamente alto" y no habrá ninguna escasez obvia en la oferta, ha asegurado el portavoz del Ministerio de Comercio, Shen Danyang, quien describió al alza en el precio como una corrección normal del mercado.

El precio del cerdo aumentó más de 20% entre el 20 de marzo y el 17 de julio de este año, de acuerdo con datos del ministerio. Esa situación generó especulaciones de que la tendencia haría crecer la inflación y obligaría al gobierno a enfrentarla con medidas de política monetaria.

Los precios de los alimentos representan cerca de una tercera parte del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de China, la principal medida de la inflación. En particular, la carne de cerdo constituye el 2,9% del IPC.

Antes del incremento de precios, los costos de la carne de cerdo habían descendido continuamente durante los dos años pasados, lo que afectó las ganancias de los ganaderos de porcino, quienes para mitigar las pérdidas redujeron la crianza. Los analistas dijeron que éste es un ejemplo de un típico "ciclo de precios del cerdo".