La Dirección General de Servicios Aduaneros de Nicaragua ha emitido una nueva normativa con la que se ha reducido las retenciones que los ganaderos deben pagar por exportar ganado vivo fuera del país, lo que podría motivar que exportaran mayor cantidad de animales, informa el diario La Prensa. Esta medida llega en un momento en que la industria cárnica del país se queja por el contrabando de animales a lo que el presidente del país, Daniel Ortega, les ha animado a presentar información sobre dicho supuesto delito.

“Hay un informe elaborado por dueños de los mataderos que habla de miles de cabezas de ganado que están saliendo. Bueno, que hablen con la Policía, que hablen con el Ejército, que presenten esos informes, es fácil, porque así como somos firmes en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado, también firmes en la lucha contra el contrabando”, dijo Ortega en declaraciones recogidas por este diario. También afirmó que es necesario bajar los precios de la carne para que se compre más cantidad de carne "y bajando el precio van a tener una mayor demanda y eso les dejará ganancias".

Frente a estas declaraciones, el director de la Cámara Nicaragüense de Plantas Exportadoras de Carne Bovina (Canicarne), Onel Pérez, asegura que este es un mensaje que resulta positivo "al reconocer el presidente que hay contrabando" y aseguró que hay una comisión que ya se está ocupando de estos temas. Sin embargo, en torno a lo de bajar los precios de la carne, el dirigente gremial ha asegurado que los mercados locales son abastecidos por los mataderos municipales y no por los mataderos privados. Añade además que tampoco están en condiciones para bajar precios ya que eso depende del coste de las reses que está muy alto.

Y respecto a los cambios en los impuestos a la exportación que pagan los ganaderos, Pérez aseguró que el interés de las empresas cárnicas es que los ganaderos paguen los impuestos por el ganado que se exporta y que este no salga mediante contrabando fuera del país.