La Oficina Veterinaria y Alimentaria de la Comisión Europea llevó a cabo del 3 al 13 de noviembre de 2015 una misión de inspección en Uruguay con el objetivo de verificar los controles oficiales que se llevan a cabo en este país en materia de residuos medicamentosos, pesticidas y contaminantes tanto en la ganadería como en la carne destinada a ser exportada hacia la Unión Europea.

Dado que la autorización, distribución y uso de los medicamentos veterinarios y aditivos para piensos tienen un impacto en el control de los residuos, las normas nacionales que regulan los sistemas de control en estas áreas también fueron parte de la auditoría. Se prestó atención a verificar la aplicación y puesta en marcha de las medidas correctoras indicadas en la anterior misión de inspección de la FVO sobre estos temas llevada a cabo en el año 2010.

Según los inspectores, el sistema nacional puesto en marcha para el control de los residuos en los mataderos y en las explotaciones de vacuno ofrece garantías suficientes para homologarse a las prácticas previstas por la legislación europea. Pese a esto la FVO destaca que son pocas las sustancias que se controlan y hay determinados niveles máximos que superan lo permitido en la UE. Además también se han detectado deficiencias en determinadas canales. Todo esto se ve apoyado por el hecho de que las muestras son analizadas en laboratorios acreditados oficialmente.

En el caso de la carne de caballo, los controles son idóneos, según la FVO. También lo son los controles sobre el usos de medicamentos veterinarios en las explotaciones ganaderas pero en el caso de la distribución comercial de estos productos los controles oficiales se ven en parte comprometidos por el hecho de que no siempre se aplica correctamente el etiquetado de los productos y la expedición de las recetas veterinarias.