Pese a la bajada de precios registrada en sus principales líneas de negocios (carburantes, carne y piensos), Corporación Alimentaria Guissona logró en 2015 alcanzar un afacturación de 1.463 millones de euros, lo que supuso un beneficio económico de 43,8 millones de euros.

La producción y la comercialización de productos alimentarios, como actividad principal de Corporación, ha alcanzado la cifra de 828 millones de euros. El detalle por los diferentes canales de comercialización destaca principalmente la venta directa a través de las tiendas "bonÀrea" que asciende a 650 millones de euros, un 1,37% superior a 2014. En volumen se ha crecido un 1,24%. Al final del ejercicio 2015 se disponía de 433 establecimientos "bonÀrea", 222 supers "bonÀrea" y 211 tiendas "bonÀrea", situados en Catalunya, Aragón, Castellón, Madrid, Guadalajara y Andorra.

En los otros canales de distribución – mayoristas, Cash & Carry, Horeca, industrial y exportación -, se han alcanzado los 178 millones de euros, con una disminución del 0,37% debido a la deflación y un aumento de volumen comercializado del 3%.

El ejercicio 2015 ha contado con un alto nivel de inversión, concretamente se han invertido 41,5 millones de euros, un 15% más que el año anterior. Destaca la puesta en marcha de una línea de deshuesado de jamones semiautomática y una nueva sala de despiece de porcino, doblando así su capacidad.

La cooperativa Agropecuaria de Guissona, que lleva a cabo todas las actividades avícolas y ganaderas de engorde y crianza de animales y suministra dicho ganado a la Corporación para su posterior transformación y distribución, cerró el ejercicio 2015 con un volumen de ventas de 260 millones de euros y un resultado neto de 4,69 millones de euros. La generación de recursos -cash flow- ha alcanzado los 5,4 millones de euros.

Las producciones avícolas y ganaderas de los socios, que son la base del ciclo productivo completo que realiza el Grupo, han seguido siendo muy importantes: 34 millones de pollos, 1,6 millones de pavos, 3 millones de codornices, 37 millones de docenas de huevos de consumo, 718 mil cerdos de engorde y 48 mil terneros. Todo ello permite la rentabilidad de la actividad ganadera de nuestro entorno rural y poder comercializar directamente, sin ningún intermediario, toda la gama de productos cárnicos.