Urbaser, división de medio ambiente de Actividades de Construcción y Servicios (ACS), planea construir una planta de biogás en la provincia de Segovia, en un lugar situado entre Chañe, Sanchonuño y Cuéllar, que eliminaría 50.000 metros cúbicos anuales de purín y cerca del 90% de los residuos hortícolas de la provincia, según informó el diputado del Área de Desarrollo Rural y Medio Ambiente de la Diputación, José Martín Sancho.

La construcción de esta planta figura en el Plan Provincial de Eliminación de Residuos Ganaderos que elabora la Diputación Provincial, con el que pretende paliar los negativos efectos medioambientales de la producción de purines en la provincia, en la que se generan al año cerca de 4 millones de metros cúbicos de residuos ganaderos, en su mayoría de porcino.

La planta de biogás apenas absorbería una pequeña parte del problema, confiándose la eliminación del resto del purín a una correcta gestión del destino tradicional de este residuo: como fertilizante de las tierras de labor.

El objetivo es compatibilizar la producción porcina y el cumplimiento de los requisitos medioambientales derivados de su explotación, buscando el equilibrio entre la producción purines y la capacidad del medio para soportarla. Unos propósitos que se enfrentan de forma directa a la realidad de Segovia donde se estima que se generan 3.900.000 metros cúbicos anuales de purines, casi el 50% de la producción regional.

Además, el uso de fertilizantes químicos provoca que la provincia concentre las cinco zonas vulnerables a la contaminación de las aguas por nitratos de origen agrícola y ganadero declaradas en Castilla y León. Estas áreas corresponden al entorno de la localidad de Navas de Oro; del enclave entre Zarzuela del Pinar, Fuentepelayo y Navalmanzano; la zona comprendida entre Escarabajosa de Cabezas, Cantimpalos y Encinillas; otra que incluye a los municipios de Cantalejo, Cabezuela, Veganzones y Turégano, y una última que integra el territorio cercano a Chañe, y la entidad de Chatún. Todas estas zonas vulnerables y otras más que lo serán próximamente, superan los parámetros de nitratos por hectárea que marcan la directivas de la Unión Europea, que podría iniciar un procedimiento sancionador contra la Junta de Castilla y León, competente en la materia a través de sus consejerías de Agricultura y Medio Ambiente.

Acabar con esta situación, que de aplicarse con rigor acabaría limitando la actividad ganadera de la provincia, es el objetivo del plan que la Diputación quiere tener ultimado antes de fin del presente año para aplicarlo a partir del próximo. Productores de porcino, organizaciones agrarias, empresas de gestión de residuos ganaderos y expertos forman parte del mismo y de la Mesa del Purín constituida al efecto.

El diputado de Desarrollo Rural y Medio Ambiente informó ayer que Urbaser ya ha confirmado a la Diputación la decisión de su consejo de administración de invertir 10 millones de euros en la planta de biogás a ubicar en la zona hortícola del Carracillo, en la comarca de Cuéllar. La empresa ya ha gestionado la disposición de suelo, la conexión de la producción energética a la red eléctrica y ha firmado acuerdos con agricultores de la zona para garantizarse el suministro de los residuos hortícolas. En la actualidad lleva a cabo gestiones para alcanzar similares acuerdos con ganaderos respecto del suministro de purín. La planta sería la segunda de la provincia en su género tras la que Guascor mantiene abierta en Turégano -que elimina 100.000 metros cúbicos anuales de purín- y generaría de ocho a diez puestos de trabajo. A diferencia de ésta la instalación de Urbaser combinaría el uso de purín y de residuos hortícolas, absorbiendo el 90% de los que se producen en Segovia.