"Propongo no introducir en adelante restricciones comerciales en lo relativo a este producto", manifestó Nikolai Vlásov, subjefe de Rosselkhoznadzor. Las autoridades sanitarias rusas intentaron "retrasar en lo posible" la aparición de la nueva influenza en el país, a fin de que los técnicos locales pudieran desarrollar la vacuna correspondiente, explicó el funcionario al agregar que "Rusia ganó dos meses y medio" gracias a esta política.

En la actualidad, hay unos 200 infectados con el virus AH1N1 en el territorio ruso mientras que en Gran Bretaña, por ejemplo, los casos de la nueva gripe se cuentan en decenas de miles, y en EEUU, en centenares de miles, dijo. Vlásov recordó que Rusia ya desembargó para esta fecha la práctica totalidad de las importaciones de carne porcina. Todavía mantiene restricciones con respecto a algunos países, entre ellos, los de la cuenca del Caribe, pero no se trata de proveedores estratégicos, señaló.