En conferencia de prensa el pasado 23 de octubre, Oliván manifestó que a pesar de que la tradición cultural considera la carne de cordero como un producto aconsejable para ancianos, niños y enfermos, en una encuesta efectuada en 2006 sólo el 3,5% de los participantes la consideraban apropiada para estos grupos, mientras que el 80% aconsejaba tomar pollo.

Los análisis efectuados durante la elaboración del estudio han demostrado que la carne de Ternasco de Aragón debe estar en la tabla de alimentos saludables y de consumo frecuente, al igual que la de pollo, ha dicho Oliván. Además, ha recordado que el consumo de este ave en nuestro país es de 30 kilos por persona al año (se consume unas tres veces a la semana), mientras que el de ternasco sólo alcanza los 2,6 kilos.

El estudio ha sido financiado por el Plan de Actuación Específico de Teruel y han participado equipos de la Facultad de Veterinaria y de la Escuela Universitaria de Ciencias de la Salud de Zaragoza. Se ha centrado en la pierna del animal, y después de analizar las de 30 corderos los resultados confirmaron que esta carne contaba únicamente con un 8% de grasa, muy por debajo de las tablas oficiales que reflejan un 12, ya que habitualmente se estudian ejemplares procedentes del ámbito anglosajón. Además, una chuleta de Ternasco de Aragón, alimentado con cereales, tiene únicamente un 2,% de grasa, mientras que las tablas reflejan hasta un 5%.

En la investigación, que comenzó hace dos años y que finalizará en junio de 2010, han participado más de 240 investigadores y 50 jóvenes que viven en distintas residencias de estudiantes de Aragón. El investigador Luis Moreno, ha explicado que los jóvenes seleccionados que comían Ternasco de Aragón presentaban concentraciones de triglicéridos incluso ligeramente menores que los que consumían pollo, informa Efe.