Con estos datos, Alimentaria logra revalidar su condición de certamen español de referencia para el sector agroalimentario y su posición entre las tres ferias alimentarias más importantes del mundo. Según sus organizadores, el balance de Alimentaria 2010 supone una "inyección de optimismo" para un sector de gran trascendencia económica en el futuro.

Las empresas participantes, unas 4.000 firmas de 75 países, han valorado de forma positiva la gran afluencia de profesionales internacionales, más de 36.000 personas procedentes de 155 países, un 9% más de los previstos inicialmente.

El presidente de Alimentaria y de Fira de Barcelona, Josep Lluís Bonet, destacó que el certamen ha cumplido con creces sus expectativa gracias a un esfuerzo de dos años de preparación. "Un éxito así no se improvisa", recordó. "Alimentaria ha constatado el vigor y al energía de su modelo ferial, así como de un sector estratégico para la economía del país". También subrayó la "magnífica plataforma de internacionalización" que Alimentaria ha demostrado ser para miles de empresas agroalimentarias que tienen en el salón su única vía de promoción exterior.

Bonet agradeció el apoyo y la presencia de los Príncipes de Asturias, quienes inauguraron la 18 edición de Alimentaria junto a la ministra de Medio Ambiente, Elena Espinosa, y el presidente de la Generalitat, José Montilla.

Más de 8.000 reuniones han tenido lugar en estos encuentros empresariales organizados como resultado de la colaboración entre la organización del salón, FIAB, y el Icex.

Para J. Antonio Valls, director de Alimentaria y director general adjunto de Alimentaria Exhibitions, el certamen se ha consolidado como "la gran oportunidad" para el sector alimentario español de hacer contactos y negocios a través de los proyectos internacionales, entre otros instrumentos que el salón ha puesto a disposición de los expositores.