Los consejeros españoles de la cuatro oficinas económicas y comerciales de España en China (Pekín, Shanghái, Cantón y Hong Kong) viajan a la sede de ICEX para impartir un total de 12 seminarios y entrevistarse con las empresas que lo deseen, con el objetivo de presentar las principales oportunidades de negocio para las empresas españolas en la región.

Este es el contenido del próximo ciclo de seminarios que ha organizado ICEX España Exportación e Inversiones para la semana del 24 al 27 de junio, y que tiene abierto su plazo de inscripción.

En las sesiones se analizarán las oportunidades de negocio para las empresas españolas de diversos sectores: infraestructuras, alimentos, vinos, cosmética, sanidad, medioambiente, automoción, moda, educación… Completará la jornada, en muchos casos, la experiencia de una empresa del sector con presencia en el mercado chino.

En la primera sesión del ciclo se ofrecerá información y consejos para hacer negocios en China, incidiendo tanto en los aspectos que son comunes al país como en aquellos en que se diferencia cada región.

China es el mayor mercado de consumo mundial con 400 millones de personas de clase media y en constante aumento. La oferta de productos y servicios importados en China es muy elevada y se trata de un mercado muy competitivo. Por tanto, resulta imprescindible realizar una estrategia de internacionalización de acuerdo con las capacidades reales de la empresa de ser competitivo en el variado mercado chino.

Por otro lado, China es un país de ciudades, y se prevé que el proceso de urbanización siga intensificándose en el futuro. Entre las urbes más importantes del norte y centro de China se encuentran Pekín, Tianjin, Chengdu y Chongqing, que suman entre ellas cuatro más de 100 millones de habitantes y son paradas necesarias para la estrategia de entrada de las empresas españolas.

A diferencia del resto de China en Hong Kong no hay aranceles ni barreras a la importación de mercancías, ni tampoco para la inversión, por ser una economía de servicios en la que la contribución de la industria al PIB es el 1,1% y la de la agricultura prácticamente inexistente. No hay por tanto producción propia que defender. Eso no quiere decir que sea un mercado fácil, más bien al contrario, la competencia es enorme. Sin embargo, hay que tener en cuenta trata de un mercado muy atractivo especialmente por ser un hub de comercio internacional cuyos tentáculos de distribución van allá de la intuitiva reexportación a China.