A pesar de la inestabilidad del mercado mundial debido al coronavirus, las guerras comerciales y la PPA, las exportaciones de carne de enero de Nueva Zelanda aumentaron un 26% en comparación con enero de 2019. En concreto, el valor alcanzado ha sido e 873,2 millones de dólares australianos, según la Meat Industry Association. Esto supuso un 50% más en carne de vacuno y un 18% más en ovino. La exportación de subproductos creció en un 2%.

Según MIA, sus empresarios han reaccionado a tiempo desviando las ventas con destino a China a otros países antes de que se frenaran las ventas en este país.

Tim Ritchie, director ejecutivo de la Asociación de la Industria de la Carne, dice que las últimas cifras subrayan la capacidad de recuperación del sector de la carne de Nueva Zelanda y sus redes globales.

“A pesar de las interrupciones en la cadena de suministro causadas por el coronavirus , la demanda global subyacente de proteínas sigue siendo fuerte. Las exportaciones del sector de la carne roja de Nueva Zelanda a 120 países de todo el mundo y esa red internacional de clientes ha permitido a la industria responder rápidamente y desviar el producto a otros mercados. Pero Nueva Zelanda no puede dar por sentada esta resistencia. El sector de la carne roja es un impulsor clave de la prosperidad para la economía de Nueva Zelanda y sustenta a innumerables comunidades regionales. Necesitamos configuraciones de políticas que reconozcan esta contribución”.