La Odepa chilena ha dado a conocer la evolución de la producción cárnica en el país. De enero a agosto de este año se ha producido un crecimiento en todas las categorías.

Así, a pesar de que en el mes de agosto el sacrificio de vacuno cae (-3,2%) respecto a igual mes del año anterior, tanto el acumulado como la producción se mantienen en niveles superiores a igual período del año pasado (7,5% y 5,9% respectivamente), alcanzando a 150.739 toneladas. Con respecto a la distribución de la faena, los novillos corresponden a 49,4% de los bovinos beneficiados. La faena de hembras se sitúa en 55,3% del beneficio total, con un crecimiento acumulado de 14,2% y 17,5% para el total de vacas y vaquillas.

Por otro lado, la producción de carne de cerdo y de aves se mantiene al alza. En el caso de la carne de cerdo 7,3% si es que se compara con el mismo periodo de 2019 y llega a las 385.514 t. El alza de la producción de carne de ave fue del 1,3%, llegando a un total de producción de 467.939 toneladas.

Las exportaciones de carne bovina durante el mes de septiembre alcanzaron las 2.364 toneladas lo que implicó un acumulado de 19.038 toneladas, que al comparar con igual período del año pasado crecieron 36% en volumen. Los principales productos exportados son cuartos traseros y delanteros a China. En el caso del porcino han crecido en un 29,4% sumando 210.397 t y en las aves crecieron en un 6,6% hasta las 120.037 t en el periodo de enero a septiembre.

Las importaciones por su parte se han ido recuperando, en el mes de septiembre se importaron 24.125 toneladas un 42,9% más que septiembre de 2019. Pese a esto, en el acumulado al mes de septiembre llega a 153.000 t lo que es 10,7% inferior a 2019. Los principales proveedores continúan siendo Paraguay, seguido de Brasil y Argentina. En porcino también se redujeron las compras al extranjero en un 18,1% (63.306 t) y un 21,1% en aves (76.533 t).