Las ventas de proteínas vegetales que imitan la carne supusieron un valor de 1.600 millones de dólares en 2019 en Europa durante 2019, según Rabobank. El total de productos comercializados alcanzó unas 144.000 t y de esa cifra, el 90% se comercializó a través de la distribución comercial.

Seís países de la UE abarcan el 79% de las ventas totales y los países de Europa del Este solo son el 8% del mercado.

Las proteínas de trigo y soja representan alrededor del 70% de las materias primas utilizadas como sustitutos de la carne en Europa. Según Rabobank, que cita datos de la consultora Euromonitor, este escenario se debe a los bajos costos y la alta disponibilidad de estas commodities. El banco también señaló que las proteínas a base de guisantes, lentejas y garbanzos mostraron la misma trayectoria de crecimiento.

"Estas alternativas representan un abanico de oportunidades para los productores de cereales y las cadenas de suministro", evaluó.

Pese al potencial de la región, Rabobank recuerda que, en el futuro, las proteínas vegetales competirán con las demandas de proteínas convencionales, como pescado, carne y pollo. Además, los costos a largo plazo deberían ser más cercanos.